Capítulo 52: Una venganza que inicia con un beso.
Mateo creía que era un juego, pero en realidad cuando terminan en el aeropuerto frente a un vuelo privado, sabe que Hera no es una mujer que diga las cosas a la ligera.
Le envía un mensaje rápido a su padre y a Lionel para que sepan en dónde estará y con quién. Sube la escalera y al entrar al jet se da cuenta que es bastante cómodo y lujoso. Hera lo invita a sentarse y muy pronto el avión despega con rumbo a Florencia.
—Y bien… —dice ella con la voz demandante—. Quisiera que me explicaras un poco mejor eso acerca de que sientes que traicionaste a tu esposa.
—No hay mucho que explicar, es eso lo que acabo de hacer al besarte —Mateo dirige su mirada hacia la ventanilla y se deja invadir un poco por la paz que significa dejar Roma e irse a su refugio.
—Vas a disculparme si es que suena muy duro, pero me gusta ser directa y muchas veces eso tiende a ser duro… Pero, ¿no se supone que ella está muerta desde hace bastante tiempo?
—Sí. Pero en cuanto supe la verdad de mis errores, me juré a m