La celebración de la boda fue algo espectacular a pesar de ser bastante íntima. Sólo amigos muy cercanos y algunas personas importantes con las que Frank tenía estrecha relación.

Los novios realmente disfrutaron todo lo que habían preparado para ellos.

A Alonso no le cabía más felicidad en su pecho, estar casado con Anna, era su sueño. Y para completar su círculo había llegado su hermosa Milena.

¿Qué más necesitaba?

_ ¿Está feliz señora Ponce de León? _ le dijo Alonso mientras bailaba el vals con su ahora esposa.

_ ¡No podría estar más feliz! Es que me veo aquí contigo y no lo puedo creer _ dijo ella soltando la risa _ Es como su estuviera en un sueño.

El la besó mientras seguían bailando.

_ Tu padre quiere hablar con los dos _ le dijo Alonso sonriendo _ No sé bien que nos quiere decir, espero que no me pida que te deje aquí... ¡porque eso sí que no lo haré!

Anna lo miró y arrugó su frente.

_ ¿De dónde sacas eso? Sabes bien que iré donde vayas tú. Por supuesto que vendré a verlos