Punto de vista de Salvaje
Habían pasado dos meses desde lo ocurrido con los Asaltantes del infierno y los traidores de nuestro club. Mi padre fue dado de alta tres días después de recibir el disparo. Quiso salir antes, pero mi madre se mantuvo firme con él, aunque refunfuñó bastante. Sé que le encanta cuando mamá saca su lado alfa con él.
Ángel, bueno, ella es otra historia. Se mudó de vuelta a mi casa. Todavía no ha sido castigada porque el castigo que tengo para ella requiere que esté desnuda. No olvidaré lo que hizo en mucho tiempo y esperaré hasta que esté lista para abrirme esa parte de sí misma nuevamente. No la estoy presionando para dar ese paso. Ella decidirá cuándo está lista.
He retomado mi posición como presidente del club y mi primer asunto es plantear el tema de las chicas del club. No me siento cómodo con que estén aquí o incluso que sean parte de este club. Sé que muchas de las señoras tienen miedo de que sus hombres las engañen y, si soy honesto, es una práctica antigu