Luca e Isla intercambiaron una mirada cómplice y negaron con la cabeza ante Vanessa, quien se mostró desconcertada.
Isla dijo misteriosamente:
—Mami, no preguntes más. Esto es un secreto entre el Tío Luca y yo, y no puedes contárselo a nadie.
Al escuchar esto, Vanessa no insistió, pero observó en secreto la interacción entre ellos, sintiendo que le ocultaban algo.
Al ver la expresión de su madre, Isla sintió un leve remordimiento y volvió a preguntar a Luca:
—Tío, ¿no puedes decírselo de verdad a Mami? Puedo ver que ella realmente quiere saberlo.
En realidad, que Vanessa conociera la situación no era lo más importante. Luca temía que, si ella se enteraba, lo rechazara directamente o dijera algo que lo lastimara. Ya lo había intentado antes, y no había resultado bien. Temía que Vanessa lo rechazara nuevamente.
Luca no sabía cómo expresar sus sentimientos a Isla, así que la acarició suavemente en la cabeza para consolarla.
—No te preocupes por ahora, Isla. No es el momento adecuado para