Si su amor no hubiera sido por un hombre casado, su historia habría podido ser una de esas que conmueven. Lástima que se enamoró de la persona equivocada en el momento equivocado. A veces, las cosas cambian y las personas también, dejando solo el recuerdo de lo que pudo ser.
Alejandro regresó a la habitación. Sofía todavía no terminaba de ducharse. Esperó solo un momento antes de verla salir envuelta en una toalla de baño. Estaba tan cansada que, al meterse a la ducha, se le olvidó llevarse ropa. Pensó que él no estaría en el cuarto, así que salió sin más.
Cuando vio que había alguien en la habitación, tardó un segundo en reaccionar. Se cubrió el pecho por reflejo.
—¡Me asustaste! ¿Cuándo entraste? No te oí para nada.
Alejandro no sabía a dónde mirar.
—Es que… vi que te estabas bañando y pensé en entrar rápido a buscar mi ropa, pero saliste de la nada.
Era una persona del todo distinta a como se portaba con Jimena. Frente a los demás, él era indiferente e imponente, con un aura que int