Un mes después...
Lennox estaba sonriendo. Ancho. Sus ojos brillaron con encanto mientras contemplaba al amor de su vida vestido con un vestido blanco y de pie al frente, con las manos en las manos, los ojos cerrados y las sonrisas reflejadas.
Violet era lo más hermoso que le había pasado jamás. Y necesita agradecerle a Silvia por meter a Violet en su vida. Debió haber tenido una de sus visiones para saber que Violet pertenecía a Lennox.
—Puede besar a la novia.
Lennox pasó su brazo alrededor de su cintura y la atrajo hacia él. Sus cuerpos se sonrojaron, sus dedos agarraron la nuca de ella mientras entrelazaba sus labios con los de ella.
Él la besó como si fuera su último maldito beso. Apasionada, fuerte y reclamante
Ella se inclinó hacia atrás mientras él se cernía sobre ella, manteniéndola cautiva en sus fuertes brazos. La besó apasionadamente, chupando su labio inferior antes de perseguir sus labios nuevamente.
Tan pronto como su lengua se hundió en su boca para acariciar la