Capítulo 122

Narra Micaela...

No podía creer todo lo que había pasado, ahora sabía que Sara era una loba de cuidado, capaz de hacer lo que fuera necesario por quedarse con Mark.

Estaba furiosa, No podía dejar de pensar en la cara de Mark cuando decidió quedarse callado, no esperaba que me defendiera, o que me pusiera por encima de ella, pero que dijera algo.

Cuando me miró sin decir una palabra, cuando intento mediar de la manera más absurda la situación, sencillamente me dió a entender que dudo de mi palabra.

Después de todo lo que vivimos, después de todo lo que compartimos, sentía que el me había clavado una daga y dolía más que nadie porque yo lo amaba y ese golpe me quemaba.

—No puedo creerlo —le dije a Mercurio, mientras nos encerrados en nuestra habitación después de que Mia puso el orden en casa —Sara no es una buena loba, con esto lo demostró, Mark va a sufrir con ella.

—Él no es tu problema —respondió, cruzado de brazos, mirándome muy serio y frío.

—Nunca lo fue, Pero me pr