NARRADORA
Cedrick le dijo de repente con todo su poder de Alfa de Alfas, presionándolo para dominarlo y que no dejara salir a su lobo, eso sería mucho peor.
— ¡Si no confías en él, confía en mí! ¡Hanko, soy tu Rey, confía en mí! ¡La salvaremos, te lo prometo, la salvaremos! – lo miró directo al alma.
Eamon listo para abalanzarse sobre Lorcan y controlarlo.
Entonces la respiración agitada de Hakon cedió un poco y solo abrazó con más fuerza Anastasia, cerrando los ojos con rabia y dolor.
Podía sentirlo todo a través de su vínculo y como ella lloraba contra su pecho.
Aunque la salvara, si perdía a las cachorras, si no podía ser madre de nuevo, Ana nunca se recuperaría de ese golpe.
— Sálvala, por favor, sálvala, haré lo quieras, daré lo que me pidas, mi vida si es necesario, pero salva a mi hembra, por favor Rey, sálvala…
Miró a Cedrick confiando por primera vez en su monarca.
— Lo haremos Hanko, lo haremos. Druida… — Cedrick estaba apostándolo todo a este movimiento.
De verdad, espera