Xander sonrió.
—Maximus, eres muy inocente. Tienes el cerebro de un lobezno de veinte años ¿Piensas que si se lo digo lo aceptará?
Xander hizo una breve pausa antes de continuar:
— No me importa si acepta o no. Con esto estoy logrando lo que quiero. Ella piensa que lo hago para castigarla y los d