C159- ANTOJOS.
C159- ANTOJOS.
Eros salió a la entrada del palacete con el celular en la mano.
—¿Vas a tardar toda la noche o ya estás cerca? —dijo, sin saludar.
La voz de Cassio sonó al instante.
—Ya estoy aquí. De hecho, te estoy mirando.
Eros levantó la vista y, efectivamente, Cassio estaba de pie al otro lado del pórtico, con una mujer colgada de su brazo.
Colgó y Cassio se acercó con una sonrisa orgullosa.
—Eros. Te presento a mi esposa, Luna.
Eros le tendió la mano con educación.
—Un gusto, Luna. Me sorprende ver que alguien logró casarse con este imbécil.
Cassio soltó una risa sin ofenderse. Luna, en cambio, sonrió como si disfrutara el tono.
—Ya sabes lo que dicen —respondió ella —, a veces los idiotas son los más divertidos.
Eros alzo las cejas como si no hubiera esperado una respuesta tan mordaz, pero luego sonrió, divertido.
—Definitivamente, tienes que conocer a mi esposa.
—Será un placer —respondió Luna.
Los tres entraron y Eros caminó directo hacia donde sabía que estaría Lucy: la mesa d