NO DEJO DE PENSARLO.
Zaira llegó a la casa, se dio una ducha rápida, tenía mucho dolor en su entrepierna, ella tomó una píldora y salió de casa rumbo al hospital, en el taxi, no dejaba de pensar en la noche anterior, a pesar de que había sido por dinero, ella lo había terminado disfrutando, el dolor de cabeza gracias a los tragos que había tomado, era también bastante fuerte.
-Señor, puede detenerse un momento, necesito pasar a esa farmacia, la chica entró, compró un analgésico y una píldora del día después, ella no podía darse el lujo de quedar embarazada a sus dieciocho años, sin una carrera profesional finalizada ni un trabajo estable, ahora menos que su madre tenía una recuperación bastante lenta.
Llegó al hospital, testeo a Stella para recordarle que no iría a la cafetería en la próxima semana, ella había pedido la semana y Stella había movido influencias para que se la dieran.
Al llegar, su madre aun estaba sedada, ella tomó las pastillas que había comprado y se sentó a esperar.
El solo recuerdo de