Mundo ficciónIniciar sesiónVeinticuatro horas.
Diego Cortés llevaba veinticuatro horas desaparecido.
Celular apagado. Porsche en el estacionamiento del penthouse. Ningún rastro digital en un mundo donde todo dejaba rastro.
Las oficinas de Cortés Hotels eran caos controlado.
Empleados susurrando. Juntas canceladas. Inversores llamando. Pánico disfrazado de profesionalismo.
Valentina no había dormido.
Caminaba por el penthouse como fantasma, celular pegado a la mano







