Simona se acercó a Victoria. –Espero y no trates de huir, te has metido en un delito muy grave.
-Solo le estaba haciendo un pequeño favor, tanto como ella me lo hizo. –dijo Victoria.
-Ya te dije que yo no te hecho nada yo estaba a punto de subir y tú me comenzaste a maltratar. –dijo Neferet con evidente enojo.
-Cálmense, ahora por favor suban. –Simona se estaba impacientando.
-Yo no me voy a subir. –protesto Neferet.
- ¿Por qué no quiere hacerlo? –pregunto Simona.
-No soy una criminal, no ves que estoy herida ya te dije que no me pienso subir allí, prefiero esperar a mi abuela.
-Si no vienes con nosotros voy a soltar a esta mujer y no te voy a defender, me iré y si ella logra matarte, no es mi problema.
-No puedes hacer eso.
-Oh si puedo.
-No intentes desafiarme, soy de la elite así que, si quieres conservar tu estúpido trabajo, esperaras hasta que llegue alguien por mí, no puedo manejar en estas condiciones.
-Si en cinco minutos no llega alguien por ti, la soltare. –dijo Simona apart