“Rafael”
Después de que Anderson y Giovana se fueron, Rubia y Raíssa, con la ayuda de sus novios, decidieron hacer la mudanza al apartamento de arriba y como no era mucho, no necesitaban ayuda y yo puse una excusa sobre quedarme un tiempo a solas con Hana, pero la verdad es que Hana no parecía estar bien desde que escuchó lo que Anderson dijo sobre Frederico. Y tan pronto como cerré la puerta la abracé en medio de la sala.
—Mi loca, ¿qué está pasando por esa cabecita? —pregunté y ella apoyó su rostro en mi pecho.
—Él siempre estuvo cerca, Rafa, siempre me estuvo vigilando. Pero ¿cómo sabía dónde estaba yo? —Parecía asustada.
—Mi flor, tu padrastro está visitando a Frederico, le está pagando el abogado, tu mamá dijo varias veces que le gusta, seguro que le contaban todo sobre ti.
—¡Pudo haberme matado, Rafa! ¡Cuántas veces me encontré con Lenon por el edificio, dentro del ascensor, en el shopping! Dios mío, ¿dónde más me siguieron?
—Mi flor, ¡cálmate! Ahora estás segura, estás con