"Rafael"
Cuando vi la llamada de Arlete en mi celular hasta me pareció extraño. Era inusual que me llamara, aún más ahora que Raíssa había vuelto. Atendí y me contó rápidamente lo que había pasado. Quería saber si Giovana estaba bien. La calmé y dije que iría hasta su casa. Debería haber insistido con ella para que aceptara el guardaespaldas.
—Anderson, Gi, necesitamos ir a la casa de Arlete. —Avisé al volver a la sala.
—¿Pasó algo con mi abuela? —Giovana se preocupó enseguida.
—Afortunadamente no, pero recibió una visita desagradable. Lenon estuvo ahí y ella lo puso a correr. —Expliqué rápidamente—. Pero vamos, en el camino les cuento lo que dijo.
Y mientras estábamos camino a la casa de Arlete conté todo lo que me dijo. Ya estábamos casi llegando, cuando Gi puso la mano en el brazo de Anderson y lo encaró.
—Anderson, dijiste que me ayudarías con mis locuras. —Encaró al novio.
—Sí, Gi. ¿Por qué? —La miró.
—Para el auto ahora. —Pidió y él paró—. ¿Ves allá atrás? ¡Es la vaca!
—