"Heitor"
Melissa y yo fuimos a tomar un café a la panadería cerca de la oficina. Me dio un "suave" tirón de orejas, digámoslo así, y me hizo volver a la realidad.
Después dictó las reglas: iríamos de compras, cuidaríamos mi aspecto, yo comandaría mi imperio mañana y luego ella me ayudaría con Samantha. No entendí qué quiso decir con todo esto, pero si estaba bajo la lluvia era para mojarme, y ya que iba a ayudarme, mejor aprovechar.
Salimos de la panadería y tomamos un taxi. Fuimos directo al hotel donde me estaba hospedando desde hacía meses.
—Martinez, es lo siguiente: vas a tomar un buen baño, juntar tus cosas y dejar este hotel ahora —dijo Melissa cuando entramos.
—Meli, no puedo quedarme en esa casa sin Sami y si vuelvo al apartamento ella nunca me perdonará.
—Uf, ya veo que tendré que cambiar el orden de las cosas —se quejó Melissa—. Está bien, te ayudo con Sami hoy y el lunes vuelves a comandar tu imperio.
—¿Hablas en serio? —esbocé una sonrisa.
—Pero tendrás que hacer t