UN ÁNGEL EN GARANTÍA. CAPÍTULO 52. Un hombre sin corazón
UN ÁNGEL EN GARANTÍA. CAPÍTULO 52. Un hombre sin corazón
Ivan se había quedado paralizado, con la mirada fija en el jefe del club, sin entender cómo ese tipo le había mentido con semejante descaro. Le daban ganas de descuartizarlo allí mismo, el problema era que esos ojos de Sari, brillando con determinación, estaban a punto de hacerlo babear de gusto; y solo reaccionó cuando su voz firme cortó el silencio ahogado.
—¡¿Por qué no le cuentas a Ivan la verdad?! ¡¿Por qué no le cuentas que estuvo aquí en este mismo club y que te dio una paliza monumental!? —retó ella a Gábor sin dudar, con una mezcla de desprecio y justicia que se notaba en cada palabra.
El tipo se estremeció, encogiéndose en su asiento, como si lo hubieran sorprendido con una trampa mortal. La compostura arrogante que había mostrado antes se desinfló como un globo pinchado; y soltó un gruñido, evitando mirarla a los ojos.
—Eso... eso no es cierto —balbuceó rabia, pasándose la mano por el cuello sudado—. Todo esto es chis