"Héctor"
Samantha y yo nos abrazamos un buen rato. Me perdí en los recuerdos. Recuerdos que quería enterrar en lo más profundo de mi ser y que no quería compartir con nadie. Sentirla ahí, abrazándome, apoyándome, fue como un bálsamo para toda esa herida abierta.
Cuando nos soltamos, la miré a los ojos, convencida de que si no fuera por ella, no habría nadie más que se quedara en mi vida, que estuviera a mi lado, que me ayudara a superar todo el dolor que mi padre me causó en el pasado.
"Vuelve a mí, Sam, para siempre", susurré.
"Héctor..." Suspiró. "¿Fuiste a esa ganadería con ella después de que los pillé juntos?"
"Sí". No quería hablar de ello, pero tenía que ser sincero con ella.
"¿Y por qué fuiste?" "Porque me envió un mensaje llorando, diciendo que su vida había terminado y que quería morir, y que si no la encontraba, se suicidaría. Puedo mostrarte el mensaje."
"No quiero verlo." Samantha se giró y cruzó los brazos, claramente a la defensiva.
"Sam, no me gusta, pero no puedo ser