Concejal Lila

Ahora era el turno de lila. Esta chica no se había sentado y solo estaba escribiendo. Esperaba a que termine, ya que estábamos en su despacho, rozó mis pechos con sus antebrazos, y sin yo darme cuenta, estaba mirándome los senos y los pezones se me habían puesto duros y se notaba.

⸻¿Qué te ocurre que tienes los pezones tan duros? ⸻Yo me quedé muda, la verdad es que no sabía por qué se me habían puesto los pezones así, hoy supongo que fue porque me los roces. Es una de las partes de mi cuerpo más débil.

Yo a lo único que atiné fue a tapármelos con ambas manos, con un poco de vergüenza, lo confieso. A todo esto tomé conciencia de que estaba sentada en su pubis, prácticamente mi sexo estaba casi incrustado en su hueso pélvico. Con voz de estar dándome una orden me dijo que el sostén me quedaba chico, y que así no podía estar trabajando bien, que me debía sentir incómoda, por lo cual me levantó la camiseta por detrás, me lo desabrochó y me lo quitó. Me llamó la atención cómo había empezad
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