Pasan lo que parece una eternidad y no tenemos noticias de Joe. La señora Corina solo ha dejado de llorar por momentos, el señor Joel se mantiene en la silla frente a nosotros y el señor Brad ha vuelto a casa para poner los asuntos de la granja en orden.
Es día último del año y jamás pensé que iba a pasarlo en el hospital y con la vida de Joe pendiendo de un hilo.
He analizado la situación y es casi seguro que me quedaré en la granja para ayudar a la señora Corina en todo cuanto pueda. Solo quiero que vuelva a estar tranquila y que la estabilidad vuelva a esta casa… con o sin mi.
—Familiares de… —la señora Corina se pone de pie casi de inmediato y va directo hacia donde está el