Al día siguiente su madre tenía trabajo extra por haber tomado un día libre antes, así que Lutxi se ofreció a cuidar de Zoe, preparándole el desayuno y llevándola al jardín de niños, intentando por una vez el tratar de ser una buena hermana mayor.
Bueno, en realidad el desayuno lo prepararon Chary y Ray, pero porque ella se los pidió… y también hubiera ayudado de no ser porque ellos prefirieron hacerlo solos, ¡pero igual fue su idea!
Al llevarla al jardín la acompañaron Henry y Chary, ya que su majestad Ray tenía de sirvientes al resto limpiando la casa como el mandón que era.
Al llegar al jardín, rápidamente se encontraron con los hermanos Castiel y Samuel.
—¡Cham! —Zoe corrió alegremente hacia su amiguito.
—¡Zoey! —Él le tomó la mano y juntos entraron al jardín con su maestra.
Lutxi agitó la mano hacia su hermanita a modo de despedida antes de voltearse para irse, pero entonces sintió una mano en su hombro.
—Qué bueno verte aquí de nuevo, preciosa. —Era Castiel, sonriendo como un