Lorenzo empujó lejos de si a la mujer, en verdad, quería hacerle daño, pero, no atreviéndose nunca a lastimar a una mujer, se limitó a mirarle con asco.
— Vete ahora, no tengo interés en las mujeres que son como tú, no vuelvas a compararte con Victoria, no hay nada en lo que puedas igualarla, no er