Capítulo 45. Imperdonable.
Aria se despertó sintiéndose aún muy débil, a pesar de que Priscilla le había llevado comida ella había sido incapaz de poder comer algo porque se había sentido realmente mal durante todo el día e incluso no sabía ni a qué hora había logrado dormirse porque había estado llorando por demasiado tiempo.
Después de un rato se levantó de la cama y lavo su rostro el cual estaba un poco hinchado por haber llorado tanto y luego decidió darse una ducha para ver si el horrible sentimiento de estar encerrada nuevamente lograba disiparse un poco y cuando terminó de ducharse se vistió y empezó a buscar su teléfono pero no lo pudo ver por ningún lado y frunció el ceño confundida, por lo que podía recordar estaba en la habitación, pero ahora no lo podía encontrar por ningún lado y solo pudo recostarse en la cama rogando que Lucien volviera pronto y le diera una oportunidad de explicarle todo.
Aunque tenía mucho miedo de que él no creyera en sus palabras todavía albergaba la esperanza de que él pud