Wone corrió con desesperación quería saber de quién se trataba, pero solamente alcanzó a observar una pequeña línea más oscura que todo lo demás.

¡Pum!

En ese momento el golpe preciso y contundente de una patada provocó que la puerta se abriera de forma monumental estampándose en la pared de roca y un conjunto de varios licántropos entraba desesperado y listo para luchar.

Para sorpresa de todos estaba completamente sola.

— ¿Te encuentras bien?— gritó Gerardo al mismo tiempo que sentía que todo su cuerpo se volvía más pesado y difícil de mover en cada uno de sus esfuerzos.

“ ¿ que carajos me está pasando? “ pensó Gerardo aunque decidió ignorarlo hasta mantener a salvo a Wone.

— Sí… sí me encuentro bien— dice Wone al mismo tiempo que trata de enfocar su mirada, algo estaba debilitando su vista y no sabía lo que era.

— Debemos encontrarlos tanto al Alfa como a la luna de la manada— susurra Wone la amenaza no era solo en contra de ella sino que varios corrían peligro.

Una especie de ele