— Es uno de los pasillos que conecta todos los niveles y las alas de esta estructura— comienza Minerva a explicarle con un tono nervioso atenta a cualquier imprevisto, su mirada inocente y su edad inexperta la hacen ver como una niña haciendo una travesura.

Pero Jack sabía que esto era algo mucho más grande que eso.

Aunque Jack quien debería estar poniendo atención en cada uno de los detalles, además de memorizar cada una las indicaciones que le daba Minerva para poder regresar por su cuenta, él solo podía concentrarse en una cosa.

Lo que había sentido al besarla de nuevo, ese sentimiento, esa atracción y esa necesidad por hacerla suya, solamente suya, sin culpas, sin secretos, sin tener que utilizarla, iba creciendo, confundiéndolo porque el plan no era enamorarse, el plan era enamorarla, utilizarla y dejarla después, en ninguna parte se suponía que él debía quedarse con ella.

Ella no sabía que de perder la batalla nadie tendría esperanza.

En un momento de frustración en el que Miner