En la mañana. 9:05 am.
Me desperté y duché, me vestí con un short rojo y una blusa de tirantes del mismo color y fui a la cocina, preparé algo para desayunar y me dirigí a la sala.
Los chicos no estaban en la casa, ya debían de haber ido a sus ensayos.
— ¿Debería ir al hospital? —pensé en voz alta cuando me pusieron las manos en los hombros, me sorprendí y volteé bruscamente para ver a Seung.
— Buenos días —saludó.
— ¡¿Por qué me asustas de ese modo?! —protesté y comencé a frotarme el cuello—. Aich, como duele.
— ¿Te hiciste daño? —Se veía preocupado, por suerte no me había dado un infarto, estaba pensando seriamente en ponerle un cascabel, una i