Flor Pérez
Escuchar cómo mi hija se aferra a la imagen de Christian, me duele, no sé qué sucede, pero si tengo algo muy claro, no voy a volver a pasar por lo mismo que hace años.
Hoy mi día era normal, hoy mi día, luego de que Christian saliera de casa, pintaba a ser tranquilo. Fui a ver a Matías, quien aún no puede terminar de creer lo que sucedió con Michael, se siente incómodo por seguir trabajando con su compañía, después de lo que nos hizo, pero no tenemos opción.
Regrese a casa con los niños, les di de cenar, los arrope e hice dormir, luego, vi el mensaje de Christian donde decía que llegaría tarde. Me preocupé un poco, pero en el pasado conocía muy bien que cuando tiene trabajo, se pierde de todo y no quiere ninguna desconcentración, por lo que no cuestione nada y me aliste para ir a dormir.
Estaba a punto de cerrar los ojos, algo inquieta por la ausencia de mi esposo, cuando esa maldita imagen llegó y con ello, abrió una puerta que yo creía cerrada. Christian y Agatha juntos,