— Te creía en la boda – dijo Sanem al ver a Ragnar dándole el biberón a su hijo.
— Lo mismo digo – la miró - ¿Qué haces aquí?
— Las bodas me ponen rara – se sentó junto a su ahijado.
Ragnar levantó una ceja, sabe que le pasa.
— Tú pudiste tener tu boda así – dijo Ragnar bebiendo un poco de agua – Pero no lo hiciste.
— Por favor no empieces – suspiro – Ya me siento como una mierda. Freddy ya no me habla, renuncio, ni siquiera me mira.
— Pues eso es lo que se hace cuando uno termina su relación y compromiso de años.
— Ragnar…
— No Sanem es la verdad – la miro – Freddy se cansó y decidió tomar otro camino porque tú no te decidías. Lo único que hacían era dañarse, ahora están bien sin estar juntos.
— Pues lo estará él, porque yo no.
— Entonces habla con él, dile la verdad – se sentó frente a ella – Sanem, si de verdad lo amas, no lo dejaras ir.
— ¿Qué hay de ti? Dejaste ir a Love.
Ragnar suspiró, la dejó ir, dejó que tomara un camino diferente lejos de él y aunque sabe que hacen lo