Por otro lado, Gabriel se adelanta para encontrar nuevamente a Mariano a su salida, no quería dejar pasar la oportunidad de acercarse a Mariano para una posible colaboración y en el mejor de los casos conseguir inversión.

Casi gritando lo intercepta, “¡Sr. Bonsole!”, el llamado hace que Mariano voltee su mirada de inmediato.

Mariano entrecierra sus ojos, con una molestia evidente en su rostro.

Gabriel le dice, “me gustaría poder reunirme con ud. tengo un proyecto que creo es de su interés…”

Mariano lo mira con frialdad e indiferencia y voltea a ver a Matilda quien estaba a su lado, “Mati, ¿Crees que es algo que valga la pena?”

Gabriel abre sus ojos en sorpresa, ¿Mati? Realmente son bastante cercanos, probablemente más de lo que había imaginado. Además, ¿por qué le estaba pidiendo su opini&o