La bomba de humo, le había ayudado a ganar tiempo, pero, eso no iba a ayudarlos a escapar. No, cuando ya la policía estaba esperándolos del otro lado. Estaban entre la policía y el auto de Augustus Delacroix con el helicóptero recuperándose del ataque. Así que, se encontraban sin salida.
El doctor frena al encontrarse sin salida y mira a la mujer a su lado, quien observa la situación con preocupación. Se habían quedado sin opciones. Por lo que, sólo podían arriesgarse e intentar que ello fuera suficiente para salir con vida de allí.
— ¿Qué vamos a hacer, señor?
— Pisa el acelerador a todo lo que da. Si logramos destruir el obstáculo que formaron con sus autos, podremos huir al punto donde podríamos cambiar de vehículos. — dice el hombre y todos asienten angustiados.
— ¿Esa es nuestra única salida? — pregunta la mujer
— Sí, es la única salida. Resistan, podemos hacerlo — dice el hombre y de inmediato, todos avanzan mientras el helicóptero comienza a tener visibilidad.
El camión y lo