Capítulo 66.
—Me asustaste, maldit0 cretino —lanzó el manotazo, mientras la otra la llevó a su pecho.
Mateo miró su hombro en donde aterrizó el golpe, luego a ella, viéndola con la boca cubierta al darse cuenta de lo que había hecho.
—No era para tí— trató de explicar, sacudiendo la mano, pues fue prácticamente darle un golpe a la pared. —¿Qué comes para estar así? No es normal.
Mateo se dedicó a ver la mueca en su rostro. Enfado y dolor. Eso era algo nuevo en ella.
—Cada vez creo más lo que se decía de tí en casa de los Bohemond— se dio la vuelta para entrar, pero la oscuridad no le gustó.
Sentía que algo dentro podía acabarla en un instante, ni siquiera tenía que dudar en alejarse de eso, pero lo hacía. Una parte de ella quería darle la oportunidad de lograrlo. Sería más fácil.
—¿Le temes a la oscuridad? —Mateo habló detrás suyo, mirando el interior del lugar.
—Claro que no. Pero había un…sujeto— culminó mirando la esquina de la puerta. —¿No lo viste?
Mateo miró a ambos lados con e