Luego de que Lía se fuera, Liam cayó en cuenta de lo que había dicho. Comenzó a sentirse como un idiota. Necesitaba de Lía para aprobar el semestre. –Diablos. ¡Diablos! –Volvió a la fiesta mucho más enojado que antes, fue directamente hasta donde estaban sus amigos y recogió su guitarra.

-Hey bro. ¿Qué tienes? –Xander fue el primero en levantarse del sofá donde estaba con una chica morena hablando un rato. –Liam.

-Me voy a dormir, hoy tuve bastante. –Los integrantes de la banda notaron el enojo de su líder y rápidamente lo sacaron de la fiesta. –Chicos, basta.

- ¿Qué te sucede? –Preguntó Paul arriesgándose.

-Acabo de arruinar mi posibilidad de pasar T.M. Le grité a la loca de Lía sobre su exnovio...

-Joder, ¿Por qué hiciste eso? ¿Tiene un ex? –Terminó preguntando Trek.

-Fue un accidente, vi una vez una conversación en su celular. Agh, solo me voy, luego me daré de baja en T.M, así ella tendrá oportunidad de trabajar sola.

-No harás tal cosa, piensa en la banda, habíamos planeado graduarnos juntos los cuatro y hemos luchado por esto, Liam. –Dijo Xander contagiándose un poco del enojo. –Háblale y resuelve esto.

-Lo haré mañana. Estoy cansado hoy. –Katrina salió de la casa y miró a los chicos.

-Tengo un problema, no sé dónde está Lía. ¿Alguno la ha visto? Me dijeron que peleó con Stacy allí dentro.

-Casualmente, se fue ya que también discutió con Liam. –Dijo Trek aguantando la risa.

- ¿Qué rayos pasó? Stacy la atacó allá dentro, ¿Por qué no la defendiste, Liam?

-Kat, deja a Liam. –Dijo Xander serio. –Liam... entra, necesitas relajarte un poco. –Ambos chicos entraron, Trek los siguió, Paul, solo estaba en silencio, comenzó a caminar dentro con los demás.

-Paul ¿Puedo hablarte? –La voz nerviosa de Katrina lo hizo detenerse. Se quedó mirando a la chica al igual que ella a él. El silencio los envolvía y ninguno de los dos se movía.

***

- ¡Trek! ¿Dónde está Paul? –Preguntó Xander al ver entrar al rubio.

-Afuera, con Kat. –Xander se volvió a levantar del sofá y salió en busca del cuarto miembro de la banda, se quedó estático al verlo tan cerca de su hermana menor. Estaba atento a lo que pasaba.

-Paul, ayer recibí la nota de un admirador secreto. –Dijo Katrina rompiendo ya el silencio. –Era la letra de una canción en español llamada Azul Oscuro. –La rubia miró al baterista y sonrió. –La cosa es que no me importa quien la haya enviado, solo hay un chico que me gusta y eres tú.

-Kat... Yo... Yo te di esa tarjeta. –Suspiró y sonrió. –Me gustas, mucho. –Xander apretó los puños, solo veía a su hermana. Ella se aventuró a tomar la mano de su amigo y baterista de su banda. –Eres muy bonita, inteligente y me gusta oírte tocar. –Paul entrelazaba los dedos con Katrina, con su mano libre acarició el mentón de la chica y la iba acercando lentamente para besarla, Xander se acercó hecho una furia empujando a Paul lejos.

- ¡ERES UN TRAIDOR! ¡¿CÓMO PUDISTE PAUL?! ¡ALÉJATE DE KAT!

- ¡XANDER! –Gritó la rubia. – ¡BASTA! ¡ÉL NO HIZO NADA!

- ¡¿AH NO?! ¡ENTRA KAT!

-Xander, no es así. –Paul intentó calmar a su amigo acercándose, molesto, el castaño solo lanzó un puñetazo en la cara al moreno haciéndolo retroceder.

- ¡Basta Xander! –Katrina empujó a su hermano mirándolo enojada. – ¿Tienes una idea de hace cuánto me gusta Paul? ¿Quieres arruinarme esto?

- ¡ES MAYOR QUE TÚ! –Dijo escupiendo sus palabras en un tono molesto. – ¡TIENES DIECINUEVE AÑOS! –Se giró a ver a su compañero de banda. –Eres un traidor, sabes como soy con ella y aun así... -Entró molesto nuevamente a la casa, recogió su guitarra casi tirando todos los instrumentos.

-Hey, ¿También tú? –Dijo Trek. –Vamos, que le tengo cariño a mi bajo.

- ¡Ustedes sabían! ¿Verdad? –Paul entró seguido de Katrina. Liam se levantó intuyendo que pasaba.

-Xander...

- ¡No puedo creerlo! Mis tres mejores amigos conspirando en mi contra. –Trek miró alrededor al ver como todos miraban aquella pelea. No dudo en actuar portándose con seriedad.

- ¡Fuera todos! –Uno a uno fue sacándolos del piso, mujeres, hombres, sentía la tensión de sus compañeros a sus espaldas y aquel instante como banda, era privado.

-No puedo creer que no me hayan dicho nada.

-Xander, te estás portando dramático. –Terminó por decir Katrina, tenía las mejillas rojas por el enojo y los ojos llorosos. –No es ningún delito, soy mayor de edad.

-Xander. –Paul tragó saliva y respiró profundo. –Sé que debí decirte, somos amigos, compañeros de banda. Le conté a Liam, y... él me aconsejó que me declarara a Kat, por eso le mandé la tarjeta, no tenía el valor para enfrentarlo.

-Liam, debiste contármelo. –Dijo Xander mirando a su amigo. –Debiste decirme. Todos ustedes son unos traidores. –Enojado salió por la puerta principal cargando el forro de su guitarra, Trek miró a Liam, Paul y Kat parados uno frente al otro en silencio.

-Yo no sabía nada. –Dijo en voz baja. –Luego hablaré con Xander, lo resolveré. Creo que por hoy tuvimos mucha fiesta.

-Buenas noches. –Liam fue el siguiente en irse. "Vaya noche", pensó. Kat miró apenada a Paul, ninguno de los dos decía más, avergonzada por lo que había sucedido, decidió irse sola hasta su edificio residencial.

Paul solo se fue, y al final, Trek. Dejando sola la casa donde se había celebrado aquella fiesta.

***

Lía se pasó la noche del sábado y gran parte del domingo abrazada a su peluche de perro, escuchaba música para acallar sus pensamientos, pero podía reproducir las palabras de William en su cabeza y por más buscaba como sacarlas de allí, no podía. La enojaba, le había tocado la fibra que más odiaba y eso hacía que lo odiara más. Apenas se levantó a comer en todo el domingo.

***

Liam se sentía pésimo por lo que le había dicho a Magnolia. –Eres un pendejo. –Tomó su celular y fue directo a los contactos, deslizó el dedo hasta dar con el número de la chica. Debía resolverlo todo; el problema con Lía, el problema con la banda. Al menos repicaba.

***

Lía escuchó su celular sonar, la canción de Sia, Helium, la sacó de su estado de sopor momentáneo, alzó el rostro un poco y lo tomó de la mesita sin ver siquiera de quien se trataba, tampoco es que pudiera ver mucho. Sus ojos andaban hinchados de llorar. Terminó contestando y acercándose el celular a la oreja. - ¿Si?

- ¿Lía? –Contestó Liam. –No cuelgues.

- ¿Qué demonios quieres ahora? –Suspiró cansada sintiendo como las lágrimas volvían a asomar. –Al menos ya sé porque revisaste mi celular, para usar cualquier cosa mía en mi contra. Eres un asno ¿Sabías?

-Vale, lo acepto, me porté horrible. Pero la cosa es que si no trabajamos juntos vamos a reprobar los dos.

-A este punto me importa una m****a los proyectos, y todo. No me vuelvas a llamar. –La chica terminó por colgar y lanzar el celular a la cesta de ropa sucia al lado de su mesita de noche.

Liam miró la llamada terminada en la pantalla de su celular. Suspiró. Intentó llamar a su mejor amigo, pero él ni siquiera se molestaba en contestar. Tenía ganas de romper algo, no podría. Encendió un cigarrillo y lo dejó en sus manos sin siquiera llevárselo a la boca, terminó por apagarlo y se revolvió el cabello. La había cagado en serio.

***

Katrina estaba decidida a arreglar los problemas que había causado. Diarios sensacionalistas ya habían sacado la noticia de la pelea de la banda local KING'S REVENGE. Su hermano la iba a escuchar. Fue hasta el piso donde estaba Xander, y, tomando su copia de la llave de la puerta abrió y entró sin tocar. –K, no tengo tiempo. –Dijo Xander al verla.

-Pues con tiempo o no, vas a oírme. –Contestó Katrina con firmeza. –No tienes motivos para enojarte con tus amigos de banda.

- ¿Ah no? Paul te estuvo coqueteando, es mucho mayor que tú.

-Xander, ya no soy una niña. Y casi cumplo veinte, solo son cuatro años. ¿Y qué hay de ti? No es por reprocharte, pero te he visto andar con groupies que apenas rondan los dieciocho. Tú conoces a Paul, sabes que él no es mujeriego como Liam o como tú, incluso. Piensa, mejor él que otro ¿No crees?

-No me simpatiza que uses esos argumentos.

-Bueno, a mí no me simpatiza que golpees al chico que me gusta. Xander, no es como si se hubiera aprovechado de mí. Nunca me había prestado atención hasta el viernes que me dio la tarjeta y, hasta lo hizo de manera anónima. Xander, tú lo conoces. –Sacó un periódico de su bolso y lo lanzó a su hermano.

- ¿Esto qué? –Leyó la primera plana. "King's Revenge, ¿Rumbo al estrellato o a estrellarse?"

-Noticias, habla solamente de los rumores de una supuesta separación debido a la pelea de ayer. ¿Esto es lo que quieres?

-Paul hizo mal, debió decirme que quería algo contigo.

- ¿Te tenía que pedir permiso o tenía que informarte? Y descuida, con la golpiza que le diste ayer seguro ya no querrá tener nada conmigo, o cualquier chico del campus que haya leído esa nota. Y hay más. En revistas de chismes no se habla de otra cosa. Así que, felicidades, ya están en portada de tabloides baratos.

-Amarillistas. –Susurró un poco molesto. –Y... Kat, soy tu hermano mayor, debo cuidarte.

-No, solo quiero que seas un hermano y me apoyes, que me dejes vivir, no mantenerme en una burbuja. Habla con tus compañeros, asume que fuiste un idiota y resuelvan esto.

-No, no lo haré. Ellos también deben disculparse.

-Te adoro en serio, pero te estás portando como un soquete.

-Tú ganas. –Dijo en un tono pedante. –Hablaré con los traidores de mis amigos y resolveré todo.

-Y para que lo sepas, fui yo la que se le declaró a Paul. Solo después que le dije que me gustaba supe que de él venía la tarjeta. No puedes culparlo por no decirte, viendo tu reacción, supongo que te tiene algo de miedo. –Xander se quedó callado. Se sentó en el sofá mientras su hermana lo miraba. Ella tenía razón. Mientras el silencio se apoderaba escucharon la puerta sonar. Katrina se acercó y abrió. Trek entró rápido antes de que Xander pudiera negarle el paso.

-No me digas que los trajiste, Kat.

- ¿Eh? No, no, Kat no me llamó, Xander. Vi algo realmente perturbador y quería confirmar ¿No has dado entrevistas sobre rumores de separación de King's Revenge?

-No, apenas me entero. ¿Por qué? –Trek sacó su celular del bolsillo de su chaleco y tras desbloquearlo y hacer una búsqueda rápida le pasó el aparato a su compañero.

-Salió esta mañana. –Xander leyó el enunciado y abrió los ojos sorprendido.

¿King's Revenge O Kings break? Miembro de banda local confirma rumores de separación.

Xander Trainor, segunda guitarra de King's Revenge nos reveló en exclusiva que la banda de los jóvenes William Lancaster, Trek Rowley, Paul Martín y él, tras una pelea en una fiesta, han quedado de darse espacio. Es posible que el guitarrista esté pensando en iniciar su carrera como solista y así mismo la voz principal, William Lancaster.

-M****a. ¿De verdad? –Xander siguió leyendo la nota y las supuestas declaraciones que él había dado. –Esto no va a gustarle al productor.

-Te lo dije, ha salido en toda la prensa. –Katrina se cruzó de brazos mirando a su hermano.

-Y apenas es que nos vieron los cazatalentos. Con esta noticia, seguro ninguno nos toma, esto nos ha tirado los planes, hermano. Tienes que hablar con Liam y Paul, saldremos en exclusiva y desmentiremos todo. Xander, no somos King's Revenge sin ti. Liam cuando lea esa nota se pondrá hecho una furia.

-Ya Kat me había convencido de hablarles, no les perdono por haberme ocultado lo de Paul.

-Yo no sabía lo de Paul. –Confesó Trek. –Me enteré el mismo día que tú. Si no quieres creerme, bien, pero debemos resolver lo de la banda.

-Bien. –Xander terminó por levantarse y fue hasta su habitación. Se cambió en tiempo record de ropa, tras ponerse una gorra, salió hasta donde estaban su hermana y amigo. –Vámonos. Deberán reunir a Liam y Paul, no sé si quieran hablarme.

-Yo me encargo de Liam. –Trek le dio unas palmaditas a Xander y luego miró a Kat. –Ella puede hacer que Paul venga, ya que lo tiene del ala.

-No tengo a nadie del ala, te recuerdo que mi hermano le ha dado un regalo en la cara. –Suspiró. –Haré lo posible por comunicarme con Paul.

-Solo no te pongas de coqueta con él.

-No prometo nada, arruinaste mi primer beso. –Katrina terminó por salir del piso seguida de Xander y Trek. Los tres tuvieron que encontrarse con los grupos de fanáticas que lloraban por la "separación" de la banda. Esquivaron blogueros, periodistas reconocidos y amateurs, preguntas, preguntas y preguntas. Katrina iba al frente y solo contestaba un "No hay declaraciones por ahora". Al llegar al edificio principal de la escuela, se refugiaron en el salón de ensayos.

-Wow, sí que rueda el chisme. –Dijo Trek. –Lo bueno es que esto nos dio publicidad y ahora somos noticia nacional.

-Mala publicidad, Trek. Mala. Bien, llamen a Liam y a Paul. –Dijo Xander sentándose en una de las butacas. Trek fue el primero en intentar. Marcó el número de Liam y al primer timbrazo contestó.

-Hola Trek. –El rubio escuchó la voz pesada de su amigo al otro lado de la línea. –Sea lo que sea, no ando de humor.

-Pues... necesito que vengas a la sala de ensayo del Royal. Donde tienen el piano y el candelero de cristal. –Dijo serio. –Y trata de evitar los caminos transitados. Hay locos en cada esquina. Lo digo en serio.

-Me asustas, Trek, dime que pasa.

-No puedo hacerlo por teléfono. Es mejor en persona

- ¿Sala de ensayos? Bien. Te veo en quince. –Colgó.

-Ya viene Liam. Kat ¿Nos haces los honores? –La rubia asintió y tomó su celular. Buscó el contacto de Paul y presionó llamar. Escuchó el entre tono y sonrió. You and I de Twinsmith. Se estaba acostumbrando a la música cuando escuchó la voz de Paul.

- ¿Hola?

-Paul, no me cuelgues. –Dijo la rubia sonrojándose un poco. Xander la miró rodando los ojos, pero sonriendo.

-Kat, creo que debemos hablar...

- ¿Te parece si nos vemos en persona y dialogamos? En el salón de ensayo en el edificio principal. –No escuchó nada por unos segundos, solo la respiración de Paul. –Por favor.

-De acuerdo, allí te veré.

-Paul. No dejes que te vean.

- ¿Por qué no? ¿Todo en orden? –Kat miró a su hermano y él asintió.

-Hay otras informaciones que han estado circulando sobre la banda, también quiero decirte sobre ello. No es buena idea hacerlo por teléfono, ven y te explicaré todo.

-Me asustas, Kat. Iré en unos minutos ¿Si?

-Vale. –Se mordió el labio y colgó. Miró a su hermano con los ojos un poco llorosos. –Dijo que tenía que hablar conmigo ¿Sabes lo que significa, Xander? ¿Lo sabes? Que ya no quiere nada. –Xander se sintió culpable, no culpaba a Paul, luego de la pelea que tuvieron, era muy posible que él ya no quisiera involucrarse amorosamente con su hermana. ¿Y si había provocado que le rompieran el corazón a Kat? Trek quedó en silencio, aquella discusión era familiar, se sentó en una de las butacas y los tres comenzaron a esperar. El tiempo pasó realmente lento, cumplido unos dieciocho minutos, Liam abrió las puertas y se detuvo en seco.

-Xander. –Se acercó cuando Trek le hizo señas de que podía. –Hermano, tenemos que hablar.

-Lo sé. –Contestó el castaño. –En cuanto llegue Paul podremos hacerlo todos. –Kat sabía que en aquella reunión sobraba, por lo que salió por uno de los laterales. El silencio entre los tres chicos fue incómodo y se incrementó en cuanto Paul cruzó las puertas tras abrirlas.

- ¿Y Kat? –Preguntó nervioso. Se quitó los lentes de sol dejando ver el morado que le había provocado el puñetazo de Xander.

-Acércate, Paul. –Terminó por decir Trek. –Ayer fue horrible. Tuvimos un momento. –Los cuatro estaban juntos, era lo que importaba, sentados uno frente al otro, podían verse las caras.

-Yo me quiero disculpar contigo, Xander. Si debí decirte que me gusta Kat. –Agachó la cabeza Paul. –Es tu hermana, es normal que te preocupes por ella. Si no estás de acuerdo, no voy a acercarme.

- ¿De verdad decidiste eso? –Alzó una ceja Xander. –Yo debo disculparme, ayer me porté como un idiota. ¿Sabes Paul? Prefiero que seas tú quien se acerque a mi hermana y no cualquier otro pedazo de m****a. Además, le rompería el corazón a Kat si hago que te alejes. –Paul sonrió. –Pero te juro que, si le haces daño, el golpe que te di anoche te parecerá caricia en comparación a la golpiza que te voy a dar.

-Xander, admito que yo igual debo pedirte disculpas. –Dijo Liam sintiéndose aliviado de que sus compañeros resolvieran sus problemas. –Yo le aconsejé a Paul que se declarase a Kat. Debí aconsejarle que hablara contigo antes. Entiendo cómo te has de sentir. Haría lo mismo por Lena.

-No hay problema, este cretino tiene mi bendición, pero hey, no te atrevas a tirarte a mi hermana, deberás primero presentar una dote. –Los cuatro rieron y chocaron los puños nuevamente.

-No celebremos del todo, hay otro problema. –Dijo Trek. –Eso iba en serio. –Sacó su celular con la noticia y la leyó en voz alta. Liam palideció al escucharla. –Por eso quería que resolviéramos todo. Alguien en la fiesta delató nuestra disputa.

-No he sido yo, jamás separaría esta banda. –Confesó Xander. –pero esto es malo.

-Debemos dar declaraciones de que es una nota falsa. Los cuatro juntos.

-Concuerdo con Liam. –Dijo Paul. –Hay que salir los cuatro juntos. Aunque yo tengo un puñetazo en la cara ¿Qué diremos de eso?

-Joder, no había pensado en eso. –Respondió Trek. –Que Kat te maquille un poco. Ya es como tu novia.

-No lo es, aún no le pido que salga conmigo.

-Ya pensaremos en algo, pero de esta salimos. –Los cuatro sonrieron y chocaron los puños. Todos estaban de acuerdo con Liam.

-Paul. Kat salió por aquella puerta. –Señaló una de las salidas de emergencia. –Seguro está esperando que esto termine. Debes hablar con ella. Y ya sabes, rómpele el corazón y necesitarás donantes de sangre. –El moreno fue directo hasta la puerta que le había señalado su compañero y salió. La rubia andaba sentada en las escaleras. Ella volteó a verlo con los ojos un poco llorosos.

-Kat... Tenemos que hablar.

-Se lo que eso significa. Y lo entiendo, sé que... no es fácil estar conmigo. Yo, entiendo... yo...

-Basta ¿Si? –Se sentó a su lado y la abrazó acunándola. –Ya no llores. Yo no quiero que entiendas, Kat.

- ¿Ah no? –Susurró. –Lamento que mi hermano te haya golpeado.

-No te preocupes por ello. –Alzó el rostro de la chica y con el pulgar le limpió las lágrimas. –Ya hablé con Xander. Él me amenazó. Literalmente. Dijo que, si te rompía el corazón, la golpiza que me daría iba a ser tal que necesitaría donantes de sangre. –Sonrió y acomodó un mechón rebelde del cabello ondulado de la rubia. –Me gustas en serio, K. –La chica se lanzó contra los labios de Paul, su boca rozó la de él en un beso. Él no tardó en seguir la danza de los labios de Kat mientras acariciaba las mejillas de ella con sus manos. Jugueteó un poco con la lengua de ella y mordió sus labios con suavidad, la realidad superaba con creces la imaginación. Dejó de besarla en cuanto el aire se hizo necesario y pegó su frente a la de ella. Ambos tenían el corazón acelerado, buscaron sus manos y las entrelazaron. –Kat, ¿Saldrías conmigo, en una cita? –La chica asintió, no le salían las palabras. –Puedes hablar, no te comí la lengua, no soy un ratón. –Provocó su risa y la abrazó para luego darle un beso en la frente.

-Solo no sé qué decir. ¿Sabes cuánto llevo soñando que me das un beso?

-Tú me lo robaste. –Susurró sonriendo mientras acariciaba las manos de la chica. –Dime ¿Saldrás conmigo, Kat?

-Sí, definitivamente sí.

Ambos volvieron juntos adentro de la sala donde esperaban los otros, Paul llevaba a Kat de la mano y los dos lucían bastante sonrientes. –Felicidades Xander, Paul es tu cuñado. –Dijo Trek dándole unos golpecitos a Xander en la espalda.

-Sí, pero nada de afectos en público. Se los pido. Ahora salgamos de aquí.

-Necesitamos una gran rola para salir de aquí triunfantes. Como Blitzkrieg Bop. –Dijo Trek tomando su celular para buscar dicha canción en su reproductor.

- ¿Ramones? –Dijo Liam entre risas. –Otra cosa necesitamos, lentes de sol.

-Suerte que siempre vengo preparada. –Kat abrió su bolso sacando varios pares de lentes oscuros con estilo aviador. –Soy adicta a estas cosas.

-Lo es, cuídate de ella, Paul. –Bromeó Xander. Kat le extendió los lentes a cada uno y todos se pusieron el accesorio. –Regreso triunfal para que no nos reprueben los medios, corriendo en tres, dos, uno. –Los cuatro chicos salieron uno al lado del otro, en cuanto pisaron las afueras, Paul tomó la mano de Kat y Trek no dudó en darle play a la canción. Los cinco caminaban al compás de la canción mientras iban con una sonrisa. Fanáticas gritaban al verlos juntos, tomaban fotos y se aglomeraban alrededor.

- ¿Se separará King's Revenge? –Se acercaron rápido varios blogueros y uno que otro periodista a los jóvenes. Liam empujó a Xander para que tuviera más protagonismo al responder.

-Señores, la noticia que circula sobre la separación de nuestra banda es totalmente falsa. Hubo un momento como compañeros que no supimos controlar, somos jóvenes y tenemos días locos, pero King's Revenge no se separa.

- ¡No lo hará! –Gritó Trek alzando su mano derecha al cielo en la seña de "Rock n' Roll". – ¡KING'S REVENGE! –Nuevos gritos de fanáticas ensordecieron a los chicos. Los cuatro junto con Kat comenzaron su carrera para huir de las alocadas chicas que solo venían tras ellos.

- ¡Mierda! –Llegaron apenas al edificio departamental c, en donde vivía Kat y los cinco entraron corriendo al ascensor. –Whooo... Hey oh, let's go! –Canturreó Liam entre risas. –Tenías razón Trek, hacía falta la canción. –Kat abrió la puerta de su piso y entraron todos. La risa se contagió entre los cinco. Decidieron que sería mejor salir de dos en dos y por las escaleras. Los primeros dos fueron Xander y Liam. Se aventuraron a salir y quince minutos después, Trek junto a Paul.

-Por favor, se cuidan. –Dijo Kat antes de ver como Paul y Trek bajaban las escaleras.

-Te llamaré si llego vivo a mi piso. ¿Te parece, Kat?

-Mucho. –Sonrió la rubia, al perderlos de su campo de visión volvió a entrar en su piso.

***

-Tú me sigues preocupando. –Dijo Xander a Liam. –Tu matrimonio forzado.

-Ah... Lía es un caso. Me dijo que era un asno y le valía m****a el semestre. No sé cómo hablarle para resolver esto. Admito que me porté como un verdadero idiota y por lo que escuché en su voz, estuvo llorando.

-Espera a mañana, Trek dijo que ella llega muy temprano a orquesta.

-Y si mal no recuerdo, también lo hace a T.M. Solo debo llegar temprano y esperar que aparezca. Le hablaría entonces, llegaríamos a un acuerdo.

-Limita tus expectativas. La italiana es la mujer más testaruda que conociste. Está vacunada contra ti.

-Lo resolveré. Tú descuida. –Cada uno llegó a su piso, Liam realmente esperaba que el día siguiente pudiera lograr algo.

***

Lía seguía en cama. Su cabeza dolía al igual que su pecho. Ya era lunes y no quería levantarse. –Ya lo haré después. –Se refugió en sus sábanas y volvió a dormir en cuanto sintió la pesadez en su cuerpo.

Liam llegó temprano al salón de clases con su guitarra y los arreglos que había logrado concretar con Lía anotados. A pesar de esperar, ella no llegó. –Buenos días.

-Buenos días. –Contestaron al profesor Payne. El maestro echó un vistazo rápido a sus estudiantes fijándose directamente en el asiento donde solía ponerse Lía, luego miró a Liam como si de aquella forma preguntara que había pasado. –Apreciación musical. El sonido es a la música, así como las palabras lo son a la literatura. El sonido posee tres cualidades, altura, intensidad y timbre. La altura es la cualidad que distingue a un sonido agudo de uno grave, cada nota musical, natural o alterada tiene una altura única. La altura se determina por las veces que un cuerpo sonoro vibre. –El profesor hizo el dibujo de unas ondas en el pizarrón quedando bastante parecido al logo de los Arctic Monkeys. –Flautas y violines, por ejemplo, producen sonidos agudos, sonidos que son inalcanzables para... por ejemplo... -Miró a sus estudiantes y sonrió. –Rees. ¿Qué tocas?

-Fagot. –Contestó el muchacho.

-Un fagot. Excelente, el fagot es un instrumento de viento que produce sonidos graves y estos sonidos están fuera del registro del alcance de un violín. Mientras más pequeño sea el cuerpo sonoro, su sonido será más agudo, al contrario, si es más grande, el sonido será, por consiguiente, más grave. Podemos verlo en la familia de los violines. Es una pena que mi única cellista no haya venido hoy, contaba con su presencia para que mostrara el sonido grave de su instrumento. Seguimos. –Sonrió. –Cada nota musical tiene una vibración única y, por ende, una altura específica, hay distintas formas de lograr dicha vibración. Puedo demostrarlo con una guitarra. William. Acércate. –El muchacho se levantó de su silla con su instrumento y se acercó a donde estaba el profesor.

- ¿Y qué hago?

-Quiero que toques la nota "La". –Liam colocó sus dedos creado el acorde y tocó. –Ese es su sonido natural. –Escuchó a sus estudiantes, algunos decían "grave", otros, indicaban que eran "agudos". Liam estaba quieto con la guitarra en sus manos, esperando. –Lancaster. Segundo traste, tercera cuerda. –Liam volvió a tocar nuevamente. Reconocía la nota.

-Es "La". –Dijo Liam. –La misma nota que hice.

-Efectivamente, imitaste la misma nota porque la vibración fue la misma. Y esto es matemática, ochocientas ochenta veces por segundo. Siéntate ya, Lancaster. –Liam regresó a su butaca y el profesor continuó su explicación. Llegado el momento, pidió las asignaciones en parejas, a excepción de Liam.

-Profesor Payne. –Se acercó el castaño una vez se hubo acabado la clase y todos habían salido del salón.

-Creo que te pedí que trabajaras con la señorita Bethlem. –Dijo el maestro con serenidad. –Ella no está, ¿Ha sucedido algo?

-Sí, profesor. –Acomodaba la guitarra sobre su hombro. –Yo agregué las tablaturas para la guitarra. Tengo aquí todo. –Suspiró. –Quiero pedirle otro favor, no la repruebe y permítale trabajar sola.

-Tú estás en una banda, William. Entenderás que el principio de la armonía no está en forzar a los otros a seguir tu partitura, sino en dejar que sus sonidos se fusionen a los tuyos para que la explosión sea magistral.

-No es justo. –Tragó saliva. –Profesor, ella trabaja bien por sí sola, discutimos mucho, no logramos ponernos de acuerdo ¿Por qué no permite que ella pueda demostrar quién es por su cuenta? Estoy seguro que ella no vino hoy por mi causa. Más que lograr trabajar en armonía, al final del día terminamos odiándonos.

-Puedes darme su tarea, pero no disolveré el equipo. Haz que funcione. –Liam entregó la partitura con las nuevas anotaciones y las tablaturas. El profesor revisó por encima de manera rápida. –William. ¿Puedes tocar esto?

-Sí, sin problemas. –Él sacó la guitarra del estuche y comenzó a tocar ya casi de memoria cada nota. Se concentró metiéndose de lleno en la melodía, daba a veces el bajo dando un suave golpe en la caja de la guitarra. Terminó la pieza y volvió a mirar al profesor.

- ¿Qué fue lo que sucedió? Si hicieron esto es porque se pusieron de acuerdo brevemente.

-Le grité. Tuvimos una pelea. Ella estaba... exigiendo que hiciera una cosa a la cual no le vi sentido.

- ¿Y tenía razón en exigir lo que pedía? –Liam meditó por unos minutos, comenzó a sentirse fatal.

-Sí, bastante.

-La cosa es esta, no puedo aprobar a Magnolia porque no está aquí, y tampoco puedo aprobarte a ti porque este semestre, los decanos y el rector me exigen que los grupos que formo trabajen juntos. Tendrás que resolver tus diferencias con la señorita Bethlem y esforzarse por aprobar las asignaciones que vendrán. ¿Lo entiendes?

-Si. –Guardó su guitarra y se levantó. –Gracias de todas formas, profesor.

-William. Tienes talento, quiero que sepas eso. –Asintió y salió del salón. Tenía que encontrar a Lía.

***

Katrina estaba preocupada, no había visto a la pelinegra en todo el día, motivo por el cual terminó llamándola al teléfono. –Vamos, contesta.

Lía despertó al escuchar la canción de Ed Sheeran, All of the Stars, que Katrina se había puesto de tono pues era su favorita. Extendió su mano y tomó el celular de la mesa y contestó. - ¿Si?, hola K.

-Dios, estás con vida.

-Sí, solo dormía. –Bostezó. –No tuve un grandioso fin de semana.

-Lo sé, Stacy peleó contigo en la fiesta y luego Liam no ayudó a resolverlo. Pero creo que se arrepiente, porque te ha estado buscando.

-No tengo especiales ganas de verlo. Seguro es para que presente las tareas de T.M con él.

-Voy a ir a tu piso a sacarte de allí para que veas la luz solar, ¿En qué edificio vives?

-En el "d", habitación 973. ¿Vamos por un café? Me urge.

-No, vamos a un bar.

-¿Un bar, en lunes?

-Why not? O sea, ¿Por qué no?

-De acuerdo. Te espero. –Colgó. La rubia caminó por el campus directo a los edificios residenciales. Mientras iba en su andanza, Liam la vio pasando por el frente del edificio donde veían clases. Corrió hasta ella y la sujetó del brazo.

-Kat, ¿Has visto a Lía?

-No desde el sábado. Iba a verla y a sacarla de su encierro. ¿Qué le dijiste para que estuviera odiándote por el resto de la eternidad?

-Mencioné a su exnovio. Kat, debo verla, tengo que hablar con ella.

- ¿Te gusta o algo así? –Bromeó la rubia mientras seguía caminando con Liam al lado.

-Por supuesto que no, es concerniente a Teoría musical.

-Claro, ven conmigo y dile lo que le vayas a decir. –Fueron a paso rápido hasta el edificio "d", Liam no pudo evitar sentirse nervioso, aquel mismo edificio era donde vivía Stacy. Llegaron hasta la puerta que Lía le había dicho a Katrina y tocaron. Pudieron escuchar desde el lado de afuera, una canción de Ed Sheeran. Liam sonrió, era una de las pocas canciones que le gustaban. Sing.

-Tal vez deba hablar primero yo con ella, así tú luego podrás sacarle el enojo.

-Espero en las escaleras. –La rubia dejó solo a William y él volvió a tocar nuevamente.

- ¡Ya voy! –Lía abrió la puerta y su cara se transformó al ver a Liam parado del otro lado, quiso cerrar de un portazo, pero el castaño fue más rápido y entró antes de que ella lo dejase afuera. –Maldita sea ¿Y ahora qué quieres? ¿No tienes alguna puta con la cual acostarte?

-Lía, Lía, Lía. Tampoco quiero estar aquí.

- ¿Y qué haces aquí entonces? Ya sal de mi piso.

-No, quiero hablarte. Hablé hoy con Payne para que te dejara trabajar sola, la cosa es que no pude lograr nada. Acabaremos reprobados al final del semestre si no hacemos esto juntos. Sé que hice mal en sacar a tu ex... te pido disculpas por ello. –Lía se quedó en silencio, se echó el cabello a un lado y cerró los ojos. –Di algo.

- ¿De verdad hablaste con el profesor?

-Lo hice, y me explicó porque debemos trabajar juntos. ¿Podemos intentarlo? Prometo cumplir las reglas del acuerdo pre-matrimonial. –La pelinegra meditó un par de segundos y asintió sin decir palabras.

-De acuerdo, vuelve nuestro acuerdo. No quiero reprobar el semestre.

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