Mundo ficciónIniciar sesiónHablar para esta tonta es algo demasiado difícil, se nota porque su mandíbula sigue en una posición que parece demasiado molesta y escasamente pude entenderle lo que dijo. Pero, la loba sigue de pie, con esa fuerza que le caracteriza.
— Mi tío te daba unas palizas que te mantenían tambaleándote, porque mientras los demás se quedaban en el suelo sufriendo, tú te mantenías en pie por tu frialdad y egoísmo.— Oh, si me recuerdas.— Te recuerdo, vagamente, pero, lo hago. Después de todo, llevo en mis pensamientos cada alma que arrebato.La sorpresa invade el rostro de la tonta mujer que realmente cree en mis palabras y después, sonrío para continuar con mi oración.— Por al menos tres segundos. — respondo y la risa se le borra por completo.— Tú…Aunque grita del enojo, este rápidamente es reemplazad






