285. ORGULLOSO NIETO DEL REY LYCAN
NARRADORA
Y no quererla significaba que Electra vagaría de nuevo sin un ancla, desaparecería algún día, o Laziel la desvanecería de una vez. Aquí y ahora.
—Acepto y esta vez no lucharé nunca más contra ti; solo tengo una condición —Lavinia la vio apretar más la mano de ese espectro tan guapo.
Ella era bien oscura de personalidad y fría. Él soleado, incluso para ser un espectro que se formó del resentimiento.
Dos seres tan diferentes y a la vez tan compatibles.
—César viene conmigo, para siempre. Él también será tu espectro contratado; nos puedes llamar para luchar por ti —le dijo con seguridad.
Lavinia, en realidad, no se asombró tanto. No después de la confesión de Laziel.
Este era el resultado que él buscaba.
Se dio cuenta de que Laziel también alimentó con su poder a César para hacerlo más poderoso, por eso recuperó su forma corpórea.
Lavinia sintió en todo momento la presencia de su macho en su espalda, de manera protectora.
Si decía que no se conmovía, era una mentira.
—Está bien