John se tambaleó hacia atrás, con los ojos abiertos de par en par y las manos temblorosas. Luego levantó un dedo y señaló directamente a Greg.

—Fue... fue él. ¡Él lanzó el ladrillo! ¡Lo juro, yo no tuve nada que ver con esto!

—Yo... Yo solo estaba... —balbuceó Greg, pero antes de poder terminar, Jaden avanzó y le dio un golpe brutal con el puño en la boca con un crujido espantoso. Los dientes se esparcieron por el pavimento como trozos de vidrio roto.

Greg intentó escaparse hacia a gatas, con la sangre goteando de su barbilla, pero Jaden lo agarró por la parte trasera del cuello de su camisa y lo levantó sin esfuerzo. Le dio otro puñetazo en la cara, abriendo una gran herida en su frente.

Se escuchó el sonido de un golpe.

Acto seguido, el grito de Greg se hizo eco por el callejón cuando Jaden torció y le rompió el brazo como si fuera una rama.

—¡AHHHH!

—Te dije... —dijo Jaden fríamente, sin mostrar emoción— que no saldrías consciente de aquí.

Sin dudar, pisó con su bota fuertem