Desconocida
Estoy agotada, pasé la noche en vela cuidando a la señora Isabella. El susto que me dió anoche fue casi igual al que sentí cuando me enteré que Andrea había intentado quitarse la vida.
Más allá de la promesa que le hice al señor Stefano, Isabella es la madre de Roberto, el amor de mi vida.
Está distancia me está matando, extraño sus besos, caricias pero sobre todo, lo que más extraño es su compañía. Es un hombre maravilloso que por desgracia le tocó una familia de m****a, incluyendo a sus hijas.
Llego al edificio donde está el espacio que considero mi hogar, donde puedo ser yo misma y no la versión que he tenido que ser frente a todos. Al llegar a mi piso, me sorprendo al ver a Roberto sentado frente a la puerta de mi departamento.
—¿Roberto? ¿Qué haces aqui?—pregunto y es más que obvia la respuesta que voy a recibir. Debe estar aquí por Isabella. Ayer no tuve tiempo de avisarle que tuve que llevarla a urgencias.
—Te extraño—sus palabras me sorprenden y veo como se p