Capítulo 10

Decir que su mundo se hundió, fue mínimo para lo que sentía su cuerpo. Parecía que una tonelada de concreto hubiese caído encima de ella, incluso supo que tenía menos peso que las palabras que el jeque había lanzado hace unos segundos.

Lia vio como el hombre arregló su traje deteniéndose a unos dos pasos de distancia del auto, y supo que, aunque no había mirado hacia atrás, estaba esperando para que ella saliera también. Juraba que en este mismo instante debía tener una temperatura corporal de cuarenta.

Jamás en su vida sintió arder tanto sus mejillas.

Tomó una bocanada profunda y apretando sus ojos, salió del auto.

Ahora estaba clara de que ningún hombre ofrecería la mano para absolutamente nada, la cercanía entre ambos géneros, parecía totalmente vetada en este lugar.

En dos pasos Lia lleg&oacut

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo