—Debo insistir en que no estoy de acuerdo, nosotros pudimos hacer esto fácilmente… —La voz de Orión Blaine se escuchó cargada de frustración.
Sus padres y Sierra lo observaron con preocupación, mientras Rachel solo lo miraba, un tanto cansada del hecho de que él no hacía más que repetir aquellas palabras una y otra vez, desde que se enteró de su decisión de asistir a la fiesta de los Winter.
—¿Sabes si va a ir esa terrible mujer? No, dije mal la pregunta, ¿sabes si van a ir esas terribles mujeres? —La pregunta implícita era más que obvia. Mara se refería a Triana Ayesa y Briana Winter.
Hacía poco se habían enterado de que Briana había logrado que Alaric le quitara su castigo después de unos años, tras mucho ruego de su parte.
—No lo sé, madre, eso me tiene aún más nervioso… —Orión le dio una respuesta a su madre con voz un tanto molesta.
Rachel no dijo una palabra, solo observó cómo su madre arreglaba el moño de la corbata torcida de su padre con dulzura, y cómo Orión, a pesar de su n