ANNA (SUE)
Despierto sintiendo mi cuerpo adolorido y mi centro está un poco lastimado, algo de lo que no podría quejarme, han sido las mejores noches de mi vida, él es insaciable y creo que yo también lo soy.
Nate no está en la cama, es un poco tarde y sé que es un hombre puntual, ya debe estar en la compañía.
Abro los ojos y miro la habitación de la casa de huéspedes, me siento mucho más cómoda aquí. Gracias al cielo la noche no termino con ninguna novedad, dejando a un lado lo de la hueca, decidimos volver a casa antes de lo esperado.
—¡Buenos días! —una inconfundible voz aguda me sobresalta, me muevo rápidamente para cubrir el escote y mi pierna.
—Dios mío pequeña, creí que dejarías de venir sin avisar —la miro, el pequeño cachorro está en sus brazos mirándome, su madre está sentada al lado de Holly.
—¿Debo hacerlo? Ya todos ustedes saben que vengo, solo sé que no debo venir en la noche o muy temprano en la mañana, eso me dijo papá —alza los hombros—, hoy no debo ir a la escuela —s