TODOS LOS BESOS DE TU BOCA. CAPÍTULO 43. Planes suspendidos
TODOS LOS BESOS DE TU BOCA. CAPÍTULO 43. Planes suspendidos
Miller achicó los ojos mientras procesaba cada palabra de Henry. Por desgracia los analistas eran inteligentes pero no magos, así que quizás había una parte del dinero robado que no se había podido rastrear.
—Doce años son muy pocos para un hombre que intentó matarnos a Rebecca y a mí en aquel accidente —dijo henry de repente, con los brazos cruzados y la mirada fija en el suelo—. Y ni hablar de cuando mandó a matarme en la cárcel.
Miller suspiró, cansado, quitándose las gafas y frotándose el puente de la nariz.
—Lo sé, Henry, pero no tenemos pruebas de eso —respondió con voz tranquila, aunque resignada—. Créeme, si las tuviéramos, no estaríamos hablando de doce años.
Él se apoyó contra la pared, respirando hondo, tratando de contener la frustración que le ardía en el pecho.
—Entonces todo lo que puedo hacer es esperar que los cumpla completos —dijo finalmente, en un tono más sereno, aunque la rabia seguía en sus ojos.
—Al me