Cuando su turno de defensa finalmente se presenta, el abogado defensor se pone de pie, pero esta vez su expresión no es tan segura como lo era antes. La verdad comienza a emerger, y poco a poco, los muros de mentiras que habían levantado alrededor del caso empiezan a derrumbarse.
¿Le sorprende? La verdad es que no, ya que el mismo no tenía ni un poco de fe en la forma absurda en la cual Lena y Nikolay habían tomado la decisión de llevar el caso
Al pensar en ellos, el hombre puede sentir como el peso de la situación se siente con fuerza sobre sus hombros y lo presionara contra el suelo, haciéndole casi imposible el mantenerse erguido.
—¿Abogado? —llama el juez, intentando sacarlo de la Clara burbuja de pensamientos en la cual se encuentra
Rl hombre asea la mirada por la figura erguida de Vera Ivanova, luego se vuelve hacia sus clientes, su expresión inescrutable. El aire en la sala parece contenerse en expectativa, esperando su siguiente movimiento.
Finalmente, deja escapar un suspir