El desfile.
Llegó el día esperado, ver el desfile de la moda de las marcas de Daniel.
En la mañana, Raquel fue al salón de belleza del hotel, para que la maquillaran y la peinaran como este tipo de actividades ameritaban, era una chica simple, ella no pedía un maquillador privado ni nadie que la peinara en su habitación, ella trataba de llevar una vida muy normal, no como la multimillonaria que era en realidad y de lo cual ella no tenía noción, esa actitud era una de las cosas que a Daniel más le gustaban de ella, la sencillez con que vivía su vida, se daba sus gustos, como los diamantes y la ropa, pero no cambiaba la calidad humana que tenía para con todos, ella no era de las que exigía, ella esperaba paciente su turno en el salón, a sabiendas de que podía pedir a la misma Pat McGrath quien es sin ninguna duda la maquilladora más famosa del planeta .
-Señorita Collins, pase por acá, que pena que tuviera que esperar, nos hubiese dicho y habríamos enviado de inmediato a alguien a su habitación par