El abuelo Jeque conoce a sus nietos.
El abuelo cargó después a la nena, con ella se quedó más tiempo, la chiqueaba y le acariciaba el cabello, la niña parecía estar muy cómoda en los brazos de su abuelo.
— Mi nieta es tan linda, son idénticos los gemelos, ambos heredaron todo de ti, mi nuera debe estar pensando que no es tan justo. Ella es la madre, y los gemelos no sacaron nada de Monserrat.
— Papá, son mis hijos también, Monserrat me ama, ella verá siempre mi figura en nuestros gemelos, así nunca se olvidará de mi.
— Pero que hijo tan engreído tengo, además mi nuera te ama tanto que no creo que te olvide nunca.
— No estoy dispuesto a correr riesgos, Alexander y Alejandra, no dejarán que mi mujer se olvide de que me ama.
(...)
Mientras tanto en una lujosa oficina, Florencia estaba por terminarse una botella de champaña, ella había estado bebiendo por horas, hasta que las empleadas llamaron al señor Cavali.
— ¿Pero que significa esto, Florencia? Estabas bien, y de pronto me llaman que estás fuera de ti de