Capítulo 26.
Lilian.
Duncan llamó a la abuela de Stella en cuanto terminó esa llamada. Se le oía la emoción en la voz y eso me hizo sonreír.
-... si, por favor. Necesito transporte rápidamente, muchas gracias abuela.
Guardó su teléfono y por unos segundos se quedó quieto.
-¿Estás...?
No me dejó terminar la pregunta. Sus labios ya estaban sobre mí y sus brazos me rodeaban con fuerza. Yo solo me rendí ante su beso y disfruté de su fuerza.
Nos separamos lentamente con la respiración entrecortada.
-Eres tú... - Murmuró poniendo su frente contra la mía.
-¿Qué?
Él comenzó a reírse.
-Tú eres mi amuleto de la buena suerte. - Dijo antes de volver a mis labios.
Tenía una vaga idea de lo que estaba diciendo, pero no le preguntaría en este momento a qué se refería exactamente. No cuando me había alzado y colocado mi trasero contra el escritorio.
Esto era emocionante en más de un sentido.
Quizá pasó un tiempo, porque escuchamos una bocina a lo lejos. Duncan se apresuró a acomodar mi ropa.
-Me enca