Capitulo — Antes del Contrato
Milagros llegó a su casa pasada la medianoche. Cerró la puerta despacio, sin prender la luz, como si el silencio fuera la única forma de entender lo que acababa de vivir.
Se sacó los zapatos y caminó directo hacia el ventanal. El Río de la Plata estaba oscuro, inmenso, inquieto. Igual que ella.
Se sirvió una copa de vino tinto. Un sorbo profundo. Otro más lento.
Se pasó la mano por el rostro y dejó escapar un suspiro que parecía contener diez años enteros.
—Dios mío… ¿en qué lío me estoy metiendo? —murmuró.
Se dejó caer en el sillón, apoyando la cabeza contra el respaldo. Cerró los ojos.
Las palabras de Ayden seguían vibrando adentro suyo como un eco molesto… y dulce.
“Quiero que lo hagas por mí. Porque necesito demostrarte que puedo dejar de ser ese nene insoportable que fui ”
Sentía la necesidad absurda de creerle… y la obligación profesional de dudar.
Se llevó otra vez la copa a los labios.
Pensó en lo bueno. En lo que quedaba de