Franck se acerco a la puerta sin mirar la cámara, abrió, parado en la puerta estaba un hombre serio, pero guapo, lo miro con desdén porque se imagina a que lo enviaron.
— Buenas tardes, se encuentra Melanny, su padre me envió para lo que ella ya sabe, déjeme pasar.
— Ella sí se encuentra, pero usted no puede pasar, este tipo de visitas son indebidas y a ella no le gustan, así que puede retirarse.
— Tenía mucha razón el señor Cliford, la servidumbre aquí se considera con derechos, quítate de la puerta, es un asunto entre la señorita Melanny y yo.
—Creo que no escucho "señor"
Le dijo mirándolo de arriba abajo con ganas de estrangularlo
—Melanny si esta, pero no desea visitas indeseables como usted, puede regresar por donde vino y decirle al señor Cliford que deje de hacer estas ridiculeces que no le quedan, ya está demasiado viejo para eso.
— ¿Quién te crees igualado?
Frank bajo la mirada, Shell habia llegado, el joven se encontro con esos ojos hermosos, pero fríos como un témpano de hi