**Alejandro**

Era una mañana tranquila en Medellín. Valentina estaba en París, y yo me había quedado trabajando desde el apartamento, revisando unas proyecciones para ORIGEN y puliendo los términos de una propuesta de distribución que acababa de llegar desde Alemania.

Había paz en el aire.

El celular vibró.

Un mensaje de Camilo.

> “¿Viste lo que están diciendo en redes sociales?”

Fruncí el ceño. Respondí de inmediato:

> “¿Decir qué?”

No obtuve respuesta inmediata. En cambio, la pantalla del computador se iluminó con una nueva alerta de correo:

“Notificación de mención en artículo internacional - Le Mode Noir”

Abrí el enlace.

Y sentí un latigazo en el pecho.

La imagen era nítida, en alta definición: una fotografía mía, presuntamente besando a una mujer en un balcón que jamás había visto. Ella tenía el cabello castaño, piel pálida, llevaba un abrigo de lana clara. A su lado, en otra imagen, una cuna.

Un bebé.

Y debajo… el titular en letras negras:

> “Empresa