Capítulo 79. Lo que callamos vs lo que elegimos.
El cielo había estado nublado durante toda la mañana por varios días, como si él también estuviera reflexionando sobre lo que pasaba en las paredes de la mansión Novak.
El jardín trasero que normalmente estaba repleto de vida por los gritos del pequeño Bastián, lucían más callados que nunca. Incluso el canto de las aves parecía haber tomado distancia de ellos.
Melisa desde el balcón de su habitación contemplaba el estanque, a lo lejos podía ver a su pequeño hijo jugando con su bisabuela Cata, también podía observar al gran son Santiago caminar hacia ellos con dos vasos en la mano.
Todo le parecía irónico, había llegado a ese lugar por un contrato firmado con Sebastian, uno que firmó para no alejarse de su hijo, uno que era una farsa total, imaginando que no dudaría mucho, que tenía los días contados en esa mansión.
Pero lo que parecía una farsa, una unión forzada se había comenzado a enredar en lo más profundo de su alma, haciéndola olvidar a veces cuando empezó a fingir y cuando empe