Maria dejó a solas a Aisha con Aryeh. Él permaneció de pie en el cuarto hasta que ella lo invitó a sentarse en un sofá que estaba cerca.
— ¿Qué es lo que quiere, señor Lancaster? Sinceramente su visita me tomó por sorpresa.
— Me di cuenta lo que le sucedió, venía nuevamente a reiterarle mi oferta de que si necesita algo no dude en pedirmelo.
— Le agradezco su oferta pero por el momento tengo todo en orden — Aisha se puso a pensar en algo — aunque sabe algo, quizás si me pueda ayudar después de todo.
— Claro, dígame.
— En caso de que se llegue a dar cuenta de algún apartamento en alquiler o casa, le agradecería mucho si me avisa y da buenas referencias de mí.
— De hecho sé de un cuarto que están alquilando en una muy buena zona, si desea puede ir una vez que le den de alta.
— Necesito los informes, ¿Cuántas personas viven ahí? ¿Los conoce? ¿Cuáles son los términos del contrato y los servicios que hay?
— Ahí viven dos personas, el dueño y una empleada, los conozco muy bien, los términos