150. Elegida por el deseo.
Por suerte, nunca se formaron los torbellinos de rumores. La relación que tengo con Gabriel sigue siendo un secreto bien guardado. Solo Vanessa notó el maldito labial en su camisa aquella vez, y hasta ahora, eso quedó entre ella y yo.
Llega mayo y, con el nuevo mes, comienzan las reuniones con los diferentes directivos de la fábrica. Todo marcha viento en popa.
La reunión con Deynna fue ágil, sin inconvenientes. Está más que emocionada con todo lo que implica el plan de los tours al invernadero; ya tiene la cabeza llena de ideas para campañas y promociones. Con Grayish, la cosa fue aún mejor. Su entusiasmo es contagioso. Se le iluminan los ojos mientras habla del proyecto. Incluso me dice que ya se imagina llevando a sus clientes más importantes a recorrer los invernaderos, como si fuera su propia creación.
Al día siguiente llega la reunión con logística. Ahí sí salen a flote los problemas. David me explica lo que ya había mencionado en la junta directiva: la línea de empaque está